José Andrëa en clave de sol
No negamos nuestro cambio de opinión acerca de la carrera musical de José Andrëa y, por qué no, Mägo de Oz. Atrapados en el binomio trve-poser, no nos permitimos ver más allá de lo evidente. Sin embargo, el año pasado asistimos a su concierto en la capital potosina, y nos voló la cabeza, principalmente por la energía tanto del cantante como del público totalmente entregado a su artista.
En aquel entonces, La Leyenda recorría la república mexicana bajo la gira “Hasta Que El Cuerpo Aguante Tour”; sin romperse mucho la cabeza, retomó sus presentaciones para este 2024 con su “Hasta Que El Cuerpo Aguante - Tour 2”. Y como regresaba a San Luis Potosí, decidimos acudir para repetir la experiencia, esta vez en Bunker 57.
Para quien no lo conozca, José Mario Martínez Arroyo González, a pesar de haber nacido en Bolivia, desarrolló su carrera musical en España. Como vocalista de Mägo de Oz, aportó en la consolidación y fama de la banda llevándolos al estrellato. Después de su salida formó Uróboros, donde más que proyecto solista, es una banda muy bien conformada.
Para esta gira, tuvo el apoyo de Asgaror, agrupación de folk metal directa desde Culiacán, Sinaloa. Además, los acompañaba una segunda violinista, la ecuatoriana Fabiola Jaramillo. Así, la puesta en escena sumaba diez músicos comprometidos a dar lo mejor de sí.
El setlist era, evidentemente, distinto al de la gira del 2023. Sonó como intro “América” la cual “es un homenaje a América, a su riqueza cultural, folklórica y multiétnica, un homenaje a lo que fue, es y será, intentando apartar pero sin obviar los acontecimientos tan convulsos recientemente acontecidos y que han sido gravísimos. (...) Esperamos de todo corazón que os guste y ¡no te mueras América!”, tema que presumiblemente saldrá en el próximo disco de Uróboros.
A continuación, y ante un público entregado de alrededor de 300 personas, sonaron clásicos como "Matar al rey", "Astartoth" y "Para Que Nunca Amanezca". Una vez entrada en calor la audiencia, la banda interpretó la mítica "Gaia", donde la voz potente y expresiva de José Andrëa nos dejó sin aliento. La interpretación de este tema, con sus arreglos de guitarra y la energía del público coreando cada palabra, fue uno de los momentos más intensos de la noche.
Siguió “El Cantar de la Luna Oscura”, “El Último Jincho”, “Finisterra”, “La Costa del Silencio” y, sorpresivamente, “Fiesta Pagana”. Nos sorprendió que sonara tan temprano, ya que suele ser una de las últimas junto con "Molinos de Viento". Decisión audaz, pero que funcionó a la perfección, encendiendo aún más al público que no dejaba de mover la cabeza.
“Desde mi Cielo”, “Bienvenidos al Medievo”, “Réquiem - Jesús de Chamberri”, “Hasta Que El Cuerpo Aguante”, y un cambio de vestuario después, pusieron a todo el mundo a saltar. La dinámica del grupo era notoria y la comunicación que tenían entre ellos, sólo con la vista, dan constancia de lo bien ensamblado que estaba.
No faltaron las baladas como el cover de Kansas, “Pensando en ti”, para después retomar la fuerza con “Alma”. Para culminar la noche se tocó precisamente “Molinos de Viento” y “La Danza del Fuego”.
Entre cerveza, música, y un tipo que daba shots de tequila usando una máscara que asemejaba a Bebop de las Tortugas Ninja, la noche fue un agasajo. Con las canciones aún resonando en nuestra mente y con la ovación ensordecera de los asistentes, partimos, esperando los próximos conciertos, hasta que el cuerpo aguante.
Agradecimientos especiales a Proud Mary Booking por las facilidades otorgadas.
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Fotos por HugoEmeCe