DragonForce, un concierto en modo legendario

La tortuosa odisea comenzó desde la salida. La vida godín, que nunca deja de sorprender, permitió la suspensión de labores a partir del mediodía para llevar a cabo un concurso de disfraces. Viendo la oportunidad, desde el inicio del día ya estaba vestido de negro, con mis botas puestas, chamarra de cuero y mi chaleco thrasher. Ni corto ni perezoso, emprendí la graciosa huida al congregarse los compañeros disfrazados para dirigirme a Querétaro.

Estando a dos horas de viaje desde San Luis Potosí, no se podía confiar en la infame carretera 57, además de ser viernes. Así, en punto de las 3:30 de la tarde, partía a mi destino: DragonForce en Club Latino.

DragonForce es una banda de power metal británica que ha dejado una huella imborrable en el género gracias a su sonido distintivo y enérgico. Su estilo se caracteriza por tempos extremadamente rápidos, solos de guitarra virtuosos, melodías pegadizas y letras con temáticas fantásticas y épicas. La banda ha logrado crear una fórmula única que combina la velocidad y la técnica del heavy metal con elementos más accesibles, lo que les ha permitido conquistar a un público amplio y diverso.

La popularidad de DragonForce experimentó un gran impulso con la inclusión de su canción "Through the Fire and Flames" en el videojuego Guitar Hero III: Legends of Rock. Esta canción, con su dificultad extrema y su ritmo frenético, se convirtió en un verdadero desafío para los jugadores, generando un enorme interés en la banda.

Gracias a esta aparición, DragonForce logró alcanzar una fama mundial que trascendió los límites del metal, llegando a un público mucho más amplio y diversificado. Millones de personas en todo el mundo se vieron expuestas a la música de los británicos y, a partir de ese momento, la banda se consolidó como uno de los máximos exponentes del power metal.

Por ello, ese 25 de octubre, el viajar a otra ciudad para verlos en vivo era un sacrifico que valía la pena tomar. Pero el cruel azar preparó el terreno para que mi trayecto fuera en dificultad experto, tal y como en Guitar Hero.

El viaje de dos horas se transformó en uno de cuatro, avanzando sinuosamente a vuelta de rueda. ¿La razón? No la hay. No hubo accidentes a la vista, por lo que todo indicaba que el cúmulo de los tráileres (sí, así se dice, creo) con su pesada carga obligaba a ir a paso lento.

Ya de noche, pasando los emblemáticos arcos de la ciudad queretana (que en realidad es un acueducto) llegábamos a Club Latino. Quien no sepa, el lugar es como el Circo Volador de la Ciudad de México, pero a la inversa. Al ser una sala de baile -presumiblemente de ritmos tropicales por lo que muestra su logo- la superficie es irregular, por lo que no se puede apreciar bien el espectáculo dependiendo de la posición en la que uno está: al estar más atrás, el escenario está más arriba.

Ingresando, la fortuna seguía poniéndome a prueba. Al momento de querer captar imágenes con mi cámara, me di cuenta del peor y más básico error de los fotógrafos: olvidé la tarjeta de memoria. Porque soy hombre que resuelve, esperé el ingreso de todos los asistentes y salí en busca de un OXXO. Están a la vuelta de tu vida, ¿no? Dentro de los incontables productos y servicios que ofrece la franquicia de tiendas de conveniencia, sabía que vendían memorias. A los tres OXXOs que fui, no tenían. Ojo ahí Querétaro.

Derrotado, regresaba cabizbajo a Club Latino, pero HugoEmeCe nunca se rinde, HugoEmeCe busca una salida. Contra todo pronóstico, por UberEats encontré un RadioShack abierto y pedí una memoria. Y justo antes de comenzar el show a las 10 de la noche, mi pedido llegaba. Gracias totales a Christian Giovanni por recorrer media ciudad en moto y remediar mi descuido.

Ahora sí, a disfrutar a DragonForce.

Herman Li, Alicia Vigil, Marc Hudson, Sam Totman y Gee Anzalone promocionaban su último disco en la gira “Warp Speed Warriors” que los traía a cuatro ciudades mexicanas. Con música de la secuela de Tron, los británicos emprendieron un primer ataque con “Revolution Deathsquad”, “Cry Thunder” y “Ashes of the Dawn”.

Las referencias a los videojuegos continuaron con su tributo a las aventuras de Link y Zelda: “Power of the Triforce”. Increíble que Nintendo no haya emprendido acciones legales a la banda, ellos demandan a todo el mundo. Siguió la grandiosa “Soldiers of the Wasteland” y “The Last Dragonborn”, provocando la locura de los asistentes.

La puesta en escena evoca a las clásicas maquinitas y las consolas de 8 y 16 bits, transportándonos a épocas donde los píxeles y las melodías eran la máxima expresión del entretenimiento digital. Desde las pantallas gigantes que proyectan animaciones pixeladas hasta los efectos de luz que simulan las explosiones y los poderes especiales de nuestros juegos favoritos. Mortal Kombat, Final Fight, Gradius y demás juegos de peleas y shoot’em ups hacían aparición.

Sonó “Black Fire”, “Fury of the Storm” y “Valley of the Damned”, sobresaliendo “Doomsday Party”, su versión de una canción bailable, mostrando imágenes de personas haciendo aerobics, como en los programas matutinos de revista.

En un punto de la noche, el vocalista Marc Hudson arrojó un oso de peluche al público. No sobrevivió a la segunda canción de hacer eso. Alucinante fueron las batallas de solos que realiizaban los tres guitarristas en escena.

La banda sale del escenario, dejando al público con ganas de más, coreando el nombre de la banda para que salieran a interpretar más temas. Complaciendo a todos, después de sonar “Highway to Oblivion”, llegaron dos covers: “My Heart Will Go On” de Céline Dion y “Wildest Dreams” de Taylor Swift. Grandes versiones donde la velocidad es protagonista. ¿Acaso soy swiftie ahora?

Con varias personas empuñando sus guitarras de Guitar Hero, se escucharon los dos últimos temas de la noche, “Heart of a Dragon” y “Through the Fire and Flames”.

Épico. No hay más que decir.

Después de tocar base en una taquería, tomaba camino para regresar a casa. Pasadas las 2 de la mañana estaba de vuelta en la capital potosina, cansado pero satisfecho de haber vivido un gran show. Si bien fue una aventura en modo experto, el concierto fue en legendario.

Agradecimientos especiales a ACK Promote por las facilidades otorgadas.

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Aquí escuchas el setlist del concierto.